TIEMPO PASCUAL – CICLO C
31 DE MAYO – VISITACIÓN DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA (F)
TIEMPO PASCUAL – CICLO C
DOMINGO VI DE PASCUA
Les dejo la paz, les doy mi paz
PRIMERA LECTURA
Lectura de los Hechos de los Apóstoles 15, 1-2. 22-29
Algunas personas venidas de Judea enseñaban a los hermanos que si no se hacían circuncidar según el rito establecido por Moisés, no podían salvarse. A raíz de esto, se produjo una agitación: Pablo y Bernabé discutieron vivamente con ellos, y por fin, se decidió que ambos, junto con algunos otros, subieran a Jerusalén para tratar esta cuestión con los Apóstoles y los presbíteros.
Entonces los Apóstoles, los presbíteros y la Iglesia entera, decidieron elegir a algunos de ellos y enviarlos a Antioquía con Pablo y Bernabé. Eligieron a Judas, llamado Barsabás, y a Silas, hombres eminentes entre los hermanos, y les encomendaron llevar la siguiente carta:
«Los Apóstoles y los presbíteros saludamos fraternalmente a los hermanos de origen pagano, que están en Antioquía, en Siria y en Cilicia. Habiéndonos enterado de que algunos de los nuestros, sin mandato de nuestra parte, han sembrado entre ustedes la inquietud y provocado el desconcierto, hemos decidido de común acuerdo elegir a unos delegados y enviárselos junto con nuestros queridos Bernabé y Pablo, los cuales han consagrado su vida al nombre de nuestro Señor Jesucristo. Por eso les enviamos a Judas y a Silas, quienes les transmitirán de viva voz este mismo mensaje.
El Espíritu Santo, y nosotros mismos, hemos decidido no imponerles ninguna carga más que las indispensables, a saber: que se abstengan de la carne inmolada a los ídolos, de la sangre, de la carne de animales muertos sin desangrar y de las uniones ilegales. Harán bien en cumplir todo esto. Adiós.»
Palabra de Dios.
SALMO Sal 66, 2-3. 5. 6 y 8 (R.: 4)
R. ¡Que los pueblos te den gracias, Señor, que todos los pueblos te den gracias!
El Señor tenga piedad y nos bendiga,
haga brillar su rostro sobre nosotros,
para que en la tierra se reconozca su dominio,
y su victoria entre las naciones.
Que canten de alegría las naciones,
porque gobiernas a los pueblos con justicia
y guías a las naciones de la tierra.
¡Que los pueblos te den gracias, Señor,
que todos los pueblos te den gracias!
Que Dios nos bendiga,
y lo teman todos los confines de la tierra.
SEGUNDA LECTURA
Lectura del libro del Apocalipsis 21, 10-14. 22-23
El ángel me llevó en espíritu a una montaña de enorme altura, y me mostró la Ciudad santa, Jerusalén, que descendía del cielo y venía de Dios. La gloria de Dios estaba en ella y resplandecía como la más preciosa de las perlas, como una piedra de jaspe cristalino.
Estaba rodeada por una muralla de gran altura que tenía doce puertas: sobre ellas había doce ángeles y estaban escritos los nombres de las doce tribus de Israel. Tres puertas miraban al este, otras tres al norte, tres al sur, y tres al oeste. La muralla de la Ciudad se asentaba sobre doce cimientos, y cada uno de ellos tenía el nombre de uno de los doce Apóstoles del Cordero.
No vi ningún templo en la Ciudad, porque su Templo es el Señor Dios todopoderoso y el Cordero. Y la Ciudad no necesita la luz del sol ni de la luna, ya que la gloria de Dios la ilumina, y su lámpara es el Cordero.
Palabra de Dios.
EVANGELIO
Lectura del santo Evangelio según san Juan 14, 23-29
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
«El que me ama será fiel a mi palabra, y mi Padre lo amará; iremos a él y habitaremos en él. El que no me ama no es fiel a mis palabras. La palabra que ustedes oyeron no es mía, sino del Padre que me envió.
Yo les digo estas cosas mientras permanezco con ustedes. Pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi Nombre, les enseñará todo y les recordará lo que les he dicho.
Les dejo la paz, les doy mi paz, pero no como la da el mundo. ¡No se inquieten ni teman! Me han oído decir: «Me voy y volveré a ustedes». Si me amaran, se alegrarían de que vuelva junto al Padre, porque el Padre es más grande que yo.
Les he dicho esto antes que suceda, para que cuando se cumpla, ustedes crean.»
Palabra del Señor.
PARA REFLEXIONAR
- En la primera lectura leemos el conocido episodio del Concilio de Jerusalén, rompiendo los tabúes de un cristianismo todavía demasiado judío. Pablo, desde el principio, se va a oponer a esta distinción entre judíos y paganos porque ya no cuenta ser de origen judío o ser pagano. La respuesta será fruto de la acción del Espíritu Santo.
***
- La segunda lectura habla de la Iglesia de la ciudad santa, Jerusalén, “que bajaba del cielo”. Es conveniente, también, mirar la Iglesia desde esta perspectiva. Darse cuenta de que la Iglesia es también la “del cielo”, la que está en «la presencia de Dios», la que se fundamenta sobre los apóstoles, la que tiene el Cordero que la ilumina. Y que «baja», es decir, que la recibimos como don.
***
- En el Evangelio Juan presenta el amor que debe transformar el mundo. La palabra de Jesús es la palabra del Padre, pero cuando Él no esté, esa palabra no se agotará, sino que el Espíritu Santo completará todo aquello que sea necesario para la vida de la comunidad. Jesús se despide en el tono de la fidelidad y con el don de la paz.
- Los semitas se daban la paz en los saludos y despedidas. La Paz era el don mesiánico por excelencia, abarcaba todos los bienes y era sinónimo de felicidad. Jesús utilizando esta costumbre le da un sentido mucho mayor. Su paz no se refiere a una prosperidad de carácter terreno y ni siquiera a la paz interior del corazón. Se trata de su paz, la paz de aquel que está en el mundo pero que no es de este mundo. La paz que llega a los discípulos a través de la comunión que los une con Él. No es una paz ya hecha, sino una tarea que hay que construir entre todos. No es una paz exenta de las dificultades de la vida, pero que contiene en germen las fuerzas necesarias para superarlas.
- Las palabras con las que comienzan esta lectura explican el contenido y los frutos de la paz que da Cristo. Es una paz que nace del amor que surge de una fe que guarda la palabra de Cristo y posibilita que se derrame el amor del Padre sobre aquel que cree, y lo hace su propia morada.
- Por eso, sólo la acción del Espíritu Santo puede llevarnos a conocer y vivir esa paz, como Jesús explica a sus discípulos cuando les anuncia que el Padre les enviará al Defensor.
- Todo el mensaje de Cristo inaugurará una nueva realidad, un modo nuevo de relación del hombre con Dios. La idea del Dios lejano, terrible y poderoso que se presenta en el rayo, el trueno o el fuego, es cambiada por la imagen de un Dios-Padre, cercano al hombre en el que ya no ve a un esclavo sino a un hijo querido en el que quiere morar.
- La verdadera paz surge del amor entre los hombres que se descubren hermanos y deciden vivir como tales. La verdadera paz exige trabajar por la erradicación de la injusticia sin ahondar las divisiones. La verdadera paz exige crear un clima de diálogo social promoviendo actitudes de respeto y escucha.
- La verdadera paz se arraiga siempre en la verdad. La paz no es un tranquilizante, sino el resultado del esfuerzo de todos por llegar a un progreso equilibrado y equitativo, por instaurar la justicia, por conseguir el respeto a los derechos de los hombres y de los pueblos.
- La verdadera paz no puede venirnos más que de Dios. Es un don suyo. Un don que debemos pedir y agradecer y con el que debemos colaborar. Un don que en Jesús se ha hecho realidad palpable y vital. Él, Jesús, es nuestra paz; el único que da la paz que necesita la humanidad. Una paz que hará posible el hombre nuevo, la nueva humanidad.
PARA DISCERNIR
- ¿Qué entiendo por Paz?
- ¿Dónde experimento la ausencia de la verdadera paz?
- ¿De qué manera trato de construir la Paz?
REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA
Dame tu paz Jesús
PARA LA LECTURA ESPIRITUAL
«El que me ama (…) y vendremos a él y haremos morada en él»
Estaba una vez recogida con esta compañía que traigo siempre en el alma y parecióme estar Dios de manera en ella, que me acordé cuando san Pedro dijo: «Tú eres Cristo, hijo de Dios vivo» (Mt 16,16); porque así estaba Dios vivo en mi alma. Esto no es como otras visiones, porque lleva fuerza con la fe; de manera que no se puede dudar que está la Trinidad por presencia y por potencia y esencia en nuestras almas. Es cosa de grandísimo provecho entender esta verdad. Y como estaba espantada de ver tanta majestad en cosa tan baja como mi alma, entendí: «No es baja, hija mía, pues está hecha a mi imagen» (Gn 1,27).
Estando una vez con esta presencia de las tres Personas que traigo en el alma, era con tanta luz que no se puede dudar el estar allí Dios vivo y verdadero… Yo estaba pensando cuán recio era el vivir que nos privaba de no estar así siempre en aquella admirable compañía, y… díjome el Señor: «Piensa, hija, cómo después de acabada no me puedes servir en lo que ahora, y come por Mí y duerme por Mí, y todo lo que hicieres sea por Mí, como si no lo vivieses tú ya, sino Yo, que esto es lo que dice san Pablo» (Gal 2,20).
Santa Teresa de Ávila – Relaciones, 46 y 48
PARA REZAR
Alabar
Si te has parado a contemplar el cielo,
un bosque, un arroyo,
que te han impresionado por algo
que has llamado «belleza»,
si has sentido de pronto ganas de cantar,
o de correr un buen trecho,
por algo que has llamado «alegría»,
si te has preguntado asombrado
cómo alguien cercano a ti
te puede querer
precisamente a ti…
¡puedes entender lo que significa alabar!
Carlo María Martini, sj
Ustedes serán mis testigos
Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 16, 11-15
Por aquellos días, zarpamos de Tróade y navegamos rumbo a Samotracia; al día siguiente, hacia Neápolis y de ahí a Filipo, colonia romana y ciudad principal de la región de Macedonia.
En Filipo nos quedamos unos días. El sábado salimos de la ciudad y nos fuimos por la orilla del río hasta un sitio donde solían tenerse las reuniones de oración. Allí nos sentamos y trabamos conversación con las mujeres que habían acudido.
Entre las que nos escuchaban, había una mujer, llamada Lidia, de la ciudad de Tiatira, comerciante en púrpura, que adoraba al verdadero Dios. El Señor le tocó el corazón para que aceptara el mensaje de Pablo. Después de recibir el bautismo junto con toda su familia, nos hizo esta súplica: «Si están convencidos de que mi fe en el Señor es sincera, vengan a hospedarse en mi casa». Y así, nos obligó a aceptar.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 149, 1-6a.9b
R. El Señor es amigo de su pueblo. Aleluya.
Entonen al Señor un canto nuevo,
en la reunión litúrgica proclámenlo.
En su creador y rey, en el Señor,
alégrese Israel, su pueblo santo. R.
En honor de su nombre,
que haya danzas, alábenlo con arpa y tamboriles.
El Señor es amigo de su pueblo
y otorga la victoria a los humildes. R.
Que se alegren los fieles en el triunfo,
que inunde el regocijo sus hogares,
que alaben al Señor con sus palabras,
porque en esto su pueblo se complace. R.
EVANGELIO
Lectura del santo Evangelio según san Juan 15, 26-16, 4
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Cuando venga el Consolador, que yo les enviaré a ustedes de parte del Padre, el Espíritu de verdad que procede del Padre, él dará testimonio de mí y ustedes también darán testimonio, pues desde el principio han estado conmigo.
Les he hablado de estas cosas para que su fe no tropiece. Los expulsarán de las sinagogas y hasta llegará un tiempo, cuando el que les dé muerte creerá dar culto a Dios. Esto lo harán, porque no nos han conocido ni al Padre ni a mí. Les he hablado de estas cosas para que, cuando llegue la hora de su cumplimiento, recuerden que ya se lo había predicho yo».
Palabra del Señor
PARA REFLEXIONAR
- Conducidos por el Espíritu, Pablo y sus acompañantes deciden dejar Asia y entrar en Europa. Y así llegan a Filipos, capital de Macedonia y empieza la misión en Europa. Filipos era una colonia romana, con una población mayoritariamente griega y romana. No parece que hubiera una sinagoga para los judíos, por eso los prosélitos simpatizantes de la religión judía, se reúnen los sábados en la orilla del río para orar.
- Allí acude Pablo y trata de convencerlos. Encuentra unas personas piadosas -sobre todo mujeres- que se reúnen allí para rezar. Dios «abre el corazón» a una vendedora de púrpura, llamada Lidia para que se convierta. Lidia pide el bautismo, y ofrece la hospitalidad de su casa a los misioneros ambulantes. Pablo habla, pero es Dios quien «dispone el corazón» a la escucha.
- Pablo se adaptaba a las circunstancias que iba encontrando. A veces predicaba en la sinagoga, otras en una cárcel, o junto al río, o en la plaza de Atenas. Si lo echaban de un sitio, iba a otro. Si lo aceptaban, se quedaba hasta consolidar la comunidad.
***
- Continuamos con el «discurso después de la Cena». El tono va a cambiar porque Jesús quiere prevenir a sus discípulos de la lucha que conocerán frente al rechazo del mundo.
- Serán odiados por el mundo, porque el mundo ama a los suyos, y los discípulos de Jesús, en principio, aunque «están en» el mundo, «no son del» mundo. Este sufrimiento de los cristianos se ve como una continuación del mismo de Cristo, a quien tampoco lo aceptó el mundo. A ellos también los perseguirán, porque el siervo no puede ser más que el Señor. Jesús quiere que cuando llegue esa hora no se tambalee su fe, sino que «se acuerden de lo que les había dicho».
- Serán marginados y llegarán a darles muerte. Sin embargo, Dios defenderá a los suyos. Jesús envía otro ‘Defensor»: su Espíritu. El Espíritu de verdad que procede del Padre, dará «testimonio» de mí.
- El Espíritu descubrirá la verdad sobre los acontecimientos de la vida de Cristo. Y los Apóstoles también darán testimonio de Cristo ya que estuvieron con Él desde un principio. Es misión del Espíritu Santo revelar a los Apóstoles toda la verdad. Porque procede del que es verdadero por esencia, trae la energía creadora y salvadora de la verdad, del amor y del perdón. Las verdades se convierten en realidades de vida para quien lo recibe.
- Este Espíritu de la Verdad dará testimonio de Jesucristo, es decir, hará que muchos hombres, a lo largo de los siglos, aceptemos su Palabra, confesemos esta verdad, recibamos su salvación, nos integremos a la comunidad de sus discípulos con todas las consecuencias que esto conlleva: exponerse, arriesgarse, dar la cara, sufrir.
- «Testigo» aparece precisamente con el sentido de «mártir»; dar la vida es el gran testimonio, confesar con la sangre la Verdad. No solamente la muerte por Cristo sino también la vida cristiana vivida con todas sus consecuencias tiene un valor de «martirio» y por eso de testimonio.
- Dar testimonio de Cristo en nuestro ambiente, siendo de palabra y de obra fieles a su estilo de vida y a sus enseñanzas, es hacer de la vida, historia de salvación. El Espíritu Santo está con nosotros. Es Él quien nos da la fuerza que necesitamos.
PARA DISCERNIR
- ¿Me rebelo ante la no aceptación del mensaje que es luz para mi vida?
- ¿Mi fe se opaca o atemoriza ante la incomprensión de los demás?
- ¿Me animo a mostrarme distinto? ¿Me mantengo firme en mi credo aunque el entorno claudique?
REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA
El Espíritu de la verdad dará testimonio sobre mí
PARA LA LECTURA ESPIRITUAL
…El libro de los Hechos, que hemos ido leyendo en el Tiempo Pascual, nos ha narrado una sucesión de persecuciones, detenciones, azotes, y hasta la muerte, como la de Esteban.
A lo largo de los dos mil años, ha seguido la misma tónica. Como al Señor le crucificaron, a sus fieles los han crucificado de mil maneras. Si la comunidad de Jesús, fiel al Evangelio de su Maestro, da testimonio de justicia o de amor, o defiende valores que no son los que la sociedad defiende, o denuncia situaciones que se dan contra la dignidad humana o contra la voluntad de Dios, es lógico que sea odiada, porque resulta incómoda. A veces será perseguida hasta la muerte, y otras, desprestigiada, ignorada, impedida en su misión. La palabra griega para decir «testigo, testimonio» es la de «mártir, martiría». Dar testimonio del Evangelio de Jesús comporta muchas veces sufrimiento y martirio. Pero también ahora tenemos la ayuda del Espíritu, el abogado, el defensor. Con su fuerza podemos librar la batalla entre el bien y el mal, y permanecer fieles a Cristo en medio de un mundo que a veces se muestra claramente contrario a su Evangelio, y dar testimonio de Cristo en nuestro ambiente, siendo de palabra y de obra fieles a su estilo de vida y a sus convicciones.
Si celebramos bien la Pascua -y estamos en su sexta semana- ése debe ser uno de los signos de que nos estamos dejando comunicar la vida nueva del Resucitado y de su Espíritu: la valentía en dar testimonio de Jesús…
J. Aldazabal. Enséñame tus caminos 3 – El Tiempo Pascual día tras día. Barcelona. Págs. 122-124
PARA REZAR
La coherencia (a propósito de San Juan Pablo II)
La coherencia no se compra,
la coherencia no se estudia en ninguna carrera.
La coherencia se va labrando
en el corazón con la adoración,
con la unción al servicio de los demás
y con la rectitud de conducta.
Sin mentiras, sin engaños, sin doblez.
Jesús dijo de Natanael una vez
cuando venía caminando:
«Aquí tienen a un israelita derecho,
sin doblez».
Creo que lo podemos decir de Juan Pablo,
el coherente.
Pero era coherente porque se dejó cincelar
por la voluntad de Dios.
Se dejó humillar por la voluntad de Dios.
Dejó que creciera en su alma
esa actitud obediencial que tuvo
nuestro padre Abraham
y desde allí todos los que lo siguieron.
Recordamos a un hombre coherente
que una vez nos dijo que este siglo
no necesita de maestros,
necesita de testigos,
y el coherente es un testigo…
Card. Jorge Bergoglio – Papa Francisco
Pero si me voy, enviaré un Defensor
Lectura de los Hechos de los Apóstoles 16, 22-34
La multitud se amotinó en contra de ellos, y los magistrados les hicieron arrancar la ropa y ordenaron que los azotaran. Después de haberlos golpeado despiadadamente, los encerraron en la prisión, ordenando al carcelero que los vigilara con mucho cuidado. Habiendo recibido esta orden, el carcelero los encerró en una celda interior y les sujetó los pies en el cepo.
Cerca de la medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban las alabanzas de Dios, mientras los otros prisioneros los escuchaban. De pronto, la tierra comenzó a temblar tan violentamente que se conmovieron los cimientos de la cárcel, y en un instante, todas las puertas se abrieron y las cadenas de los prisioneros se soltaron. El carcelero se despertó sobresaltado y, al ver abiertas las puertas de la prisión, desenvainó su espada con la intención de matarse, creyendo que los prisioneros se habían escapado. Pero Pablo le gritó: «No te hagas ningún mal, estamos todos aquí.»
El carcelero pidió unas antorchas, entró precipitadamente en la celda y, temblando, se echó a los pies de Pablo y de Silas. Luego los hizo salir y les preguntó: «Señores, ¿qué debo hacer para alcanzar la salvación?»
Ellos le respondieron: «Cree en el Señor Jesús y te salvarás, tú y toda tu familia.»
En seguida le anunciaron la Palabra del Señor, a él y a todos los de su casa. A esa misma hora de la noche, el carcelero los atendió y curó sus llagas. Inmediatamente después, fue bautizado junto con toda su familia. Luego los hizo subir a su casa y preparó la mesa para festejar con los suyos la alegría de haber creído en Dios.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 137, 1-3. 7c-8
R. Señor, tu derecha me salva.
Te doy gracias, Señor, de todo corazón,
te cantaré en presencia de los ángeles.
Me postraré ante tu santo Templo. R.
Daré gracias a tu Nombre
por tu amor y tu fidelidad.
Me respondiste cada vez que te invoqué
y aumentaste la fuerza de mi alma. R.
Tu derecha me salva.
El Señor lo hará todo por mí.
Tu amor es eterno, Señor,
¡no abandones la obra de tus manos! R.
EVANGELIO
Lectura del santo Evangelio según san Juan 16, 5-11
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
«Ahora me voy al que me envió, y ninguno de ustedes me pregunta: «¿A dónde vas?» Pero al decirles esto, ustedes se han entristecido. Sin embargo, les digo la verdad: les conviene que yo me vaya, porque si no me voy, el Paráclito no vendrá a ustedes. Pero si me voy, se lo enviaré.
Y cuando él venga, probará al mundo dónde está el pecado, dónde está la justicia y cuál es el juicio.
El pecado está en no haber creído en mí. La justicia, en que yo me voy al Padre y ustedes ya no me verán. Y el juicio, en que el Príncipe de este mundo ya ha sido condenado.»
Palabra del Señor.
PARA REFLEXIONAR
- El escenario de la narración de hoy es la ciudad y colonia romana de Filipos, donde Pablo funda la primera comunidad cristiana de Europa con ocasión de su segundo viaje. El relato presenta a Pablo que ha liberado de un demonio de adivinación, a una esclava que los había seguido por toda la ciudad dando grandes gritos. Los dueños de la esclava, la explotaban haciéndola adivinar por dinero y ven que han perdido una fuente de ingresos, por eso denuncian a Pablo y Silas que son luego detenidos.
- Estando en la cárcel se produce un terremoto que abre las puertas de la prisión y deshace las ligaduras de todos. El carcelero de Filipos fue preservado del suicidio por la confortadora palabra de Pablo: “no te hagas daño, aquí estamos todos”.
- La liberación milagrosa y la actitud honesta de Pablo que no aprovecha para escapar lleva a la conversión del carcelero y de su familia. Y lo que había comenzado tan dolorosa y dramáticamente termina en la alegría y en la luz y los cantos de la fiesta. El carcelero junto con su familia hace fiesta por la fe recibida, y agasaja a los apóstoles.
- Pablo no duda en invocar sus derechos de ciudadano romano y fuerza a los magistrados a presentar excusas. La palabra de Dios no podrá ser encadenada, aunque encadenen a sus predicadores.
***
- Los discípulos siguen sin comprender la muerte como marcha al Padre; para ellos es el fin de todo. Se llenan de tristeza al pensar en la ausencia, que ellos interpretan como separación definitiva. El mundo se presenta para ellos como un adversario muy fuerte y, sin Jesús, se sienten indefensos.
- Cristo afirma que vuelve al Padre y el Espíritu Paráclito será el testigo de su presencia. El modo de vida que El tendrá después de su resurrección no será ya perceptible por los sentidos, sino solamente por la fe. Cristo trata de convencer a sus apóstoles de que no busquen ya una presencia física, sino que descubran en la fe la presencia «espiritual».
- El Espíritu va a dar a los discípulos la posibilidad de amar como Jesús. Hasta ahora Jesús es para ellos un modelo; el Espíritu hará que sea la fuente interior de su vida. Enviando al Espíritu, Jesús es consciente de multiplicar su Presencia: el Espíritu no tiene ningún límite, puede invadirlo todo.
- La Iglesia en su misión profética, debe proponer y trabajar dando respuestas concretas, nacidas del Evangelio para una vida y un camino nuevo del hombre. Gracias al querer del Padre, la redención del Hijo y la acción constante del Espíritu Santo, todos podemos responder con total fidelidad a su llamada, ayudando a los otros a hacerlo.
- No estamos solos, tenemos en nosotros, en cada uno de nosotros, en la realidad de nuestra vida personal, el don, la presencia, la fuerza del Espíritu que nos ha sido dado para ser testigos de Jesucristo, llevando una vida de discípulos coherente con el Evangelio de Jesús.
PARA DISCERNIR
- ¿Soy consciente de la lucha que se juega en mi vida y en el mundo?
- ¿Asumo los valores de Cristo y trato de crecer en ellos para que el enemigo no me agarre desprevenido?
- ¿Pido al Espíritu su fuerza y su luz?
REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA
El Príncipe de este mundo ya ha sido condenado
PARA LA LECTURA ESPIRITUAL
Cuando Jesús vuelva
Jesús no revela plenamente el Espíritu Santo hasta que él mismo no ha sido glorificado por su Muerte y su Resurrección. Sin embargo, lo sugiere poco a poco (…). A sus discípulos les habla de él abiertamente a propósito de la oración (cf. Lc 11, 13) y del testimonio que tendrán que dar (cf. Mt 10, 19-20).
Solamente cuando ha llegado la hora en que va a ser glorificado Jesús promete la venida del Espíritu Santo, ya que su Muerte y su Resurrección serán el cumplimiento de la Promesa hecha a los Padres: El Espíritu de Verdad, el otro Paráclito, será dado por el Padre en virtud de la oración de Jesús; será enviado por el Padre en nombre de Jesús; Jesús lo enviará de junto al Padre porque él ha salido del Padre. El Espíritu Santo vendrá, nosotros lo conoceremos, estará con nosotros para siempre, permanecerá con nosotros; nos lo enseñará todo y nos recordará todo lo que Cristo nos ha dicho y dará testimonio de Él; nos conducirá a la verdad completa y glorificará a Cristo. En cuanto al mundo, lo acusará en materia de pecado, de justicia y de juicio.
Catecismo de la Iglesia Católica – 728-729
PARA REZAR
Pedimos el Espíritu
Querido Jesús:
nos enseñaste con palabras y con tu ejemplo
cuál es la misión y el objetivo de la Iglesia, tu pueblo,
para que ella sea, en medio de la humanidad,
la gran manifestación de la presencia
de Dios Salvador,
sin tener en cuenta la raza,
el color o la cultura de cada pueblo,
pues todos por igual estamos llamados
a participar del Reino.
Por eso le pedimos a Dios, por tu intermedio,
que toda la Iglesia, como esta comunidad,
sepa hacerse todo para todos
a fin de que la buena noticia
sea divulgada y conocida
por todos los que buscan
la verdad con sincero corazón.
Te pedimos que envíes tu Santo Espíritu
como lo enviaste sobre los Apóstoles en Pentecostés
para que no solo vivamos conforme a tu Palabra
sino también para que seamos una comunidad misionera.
MIÉRCOLES VI DE PASCUA
El Espíritu les hará conocer toda la verdad
Lectura de los Hechos de los Apóstoles 17, 15. 22-18, 1
Los que acompañaban a Pablo lo condujeron hasta Atenas, y luego volvieron con la orden de que Silas y Timoteo se reunieran con él lo más pronto posible.
Pablo, de pie, en medio del Areópago, dijo:
«Atenienses, veo que ustedes son, desde todo punto de vista, los más religiosos de todos los hombres. En efecto, mientras me paseaba mirando los monumentos sagrados que ustedes tienen, encontré entre otras cosas un altar con esta inscripción: «Al dios desconocido». Ahora, yo vengo a anunciarles eso que ustedes adoran sin conocer.
El Dios que ha hecho el mundo y todo lo que hay en él no habita en templos hechos por manos de hombre, porque es el Señor del cielo y de la tierra. Tampoco puede ser servido por manos humanas como si tuviera necesidad de algo, ya que él da a todos la vida, el aliento y todas las cosas.
El hizo salir de un solo principio a todo el género humano para que habite sobre toda la tierra, y señaló de antemano a cada pueblo sus épocas y sus fronteras, para que ellos busquen a Dios, aunque sea a tientas, y puedan encontrarlo. Porque en realidad, él no está lejos de cada uno de nosotros. En efecto, en él vivimos, nos movemos y existimos, como muy bien lo dijeron algunos poetas de ustedes: «Nosotros somos también de su raza».
Y si nosotros somos de la raza de Dios, no debemos creer que la divinidad sea semejante al oro, la plata o la piedra, trabajados por el arte y el genio del hombre.
Pero ha llegado el momento en que Dios, pasando por alto el tiempo de la ignorancia, manda a todos los hombres, en todas partes, que se arrepientan. Porque él ha establecido un día para juzgar al universo con justicia, por medio de un Hombre que él ha destinado y acreditado delante de todos, haciéndolo resucitar de entre los muertos.»
Al oír las palabras «resurrección de los muertos», unos se burlaban y otros decían: «Otro día te oiremos hablar sobre esto.» Así fue cómo Pablo se alejó de ellos.
Sin embargo, algunos lo siguieron y abrazaron la fe. Entre ellos, estaban Dionisio el Areopagita, una mujer llamada Dámaris y algunos otros.
Después de esto, Pablo dejó Atenas y fue a Corinto.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 148, 1-2. 11-12. 13-14a. 14bc
R. Llenos están los cielos y la tierra de tu gloria.
Alaben al Señor desde el cielo,
alábenlo en las alturas;
alábenlo, todos sus ángeles,
alábenlo, todos sus ejércitos. R.
Los reyes de la tierra y todas las naciones,
los príncipes y los gobernantes de la tierra;
los ancianos, los jóvenes y los niños. R.
Alaben el nombre del Señor.
Porque sólo su Nombre es sublime;
su majestad está sobre el cielo y la tierra,
y él exalta la fuerza de su pueblo. R.
¡A él, la alabanza de todos sus fieles,
y de Israel, el pueblo de sus amigos! R.
EVANGELIO
Lectura del santo Evangelio según san Juan 16, 12-15
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
«Todavía tengo muchas cosas que decirles, pero ustedes no las pueden comprender ahora. Cuando venga el Espíritu de la Verdad, él los introducirá en toda la verdad, porque no hablará por sí mismo, sino que dirá lo que ha oído y les anunciará lo que irá sucediendo.
El me glorificará, porque recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes.
Todo lo que es del Padre es mío. Por eso les digo: «Recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes».»
Palabra del Señor.
PARA REFLEXIONAR
- Atenas sigue siendo la capital filosófica, en ella se discuten las grandes corrientes del pensamiento. Es una ciudad cosmopolita en la que los esclavos y los pobres constituyen los dos tercios de la población. Una ciudad en la que se mezclan y se enfrentan todas las razas y donde conviven todos los vicios. El Areópago es la «plaza» central donde se reúnen los filósofos y los estudiantes para discutir.
- De todos los discursos misioneros de Pablo dirigidos a los paganos, el que hace a los atenienses es el más largo.
- El discurso de Pablo en el Areópago es un típico ejemplo de cómo hay que presentar el plan de Dios a paganos. En este caso lo hace a los pensadores griegos. Pablo se adapta a su manera de pensar, se hace «griego con los griegos», como fue «judío con los judíos».
- Arranca su discurso captando la atención de los oyentes diciéndoles que ha visto en el camino gran cantidad de altares dedicados a los distintos dioses, y hasta un altar “al dios desconocido”, para asegurarse de que no dejan de adorar a ninguno. Les anuncia que “ese dios desconocido” por ellos es del que viene a predicarles. Se trata del único Dios vivo y verdadero, el creador sabio del mundo y del género humano, el Padre providente que alimenta a sus hijos permitiendo el paso de las estaciones y haciendo fecunda la tierra.
- Afirma además que somos de su estirpe citando a un pensador griego y por lo tanto, lo tenemos que buscar dentro de nosotros mismos. Les brinda una mirada espiritual de su religión, para llegar a Cristo Jesús, el enviado por Dios, al que resucitó de entre los muertos.
- El relato culmina con la noticia de que un tal Dionisio, miembro de la asamblea, una mujer llamada Dámaris y algunos más abrazaron la fe.
***
- Jesús se despide consciente de que no les dijo todo a sus discípulos, pero convencido de que vendrá el Espíritu que llevará a plenitud su obra. En Dios hay siempre cosas nuevas a descubrir. La fe es una progresión. Es una vida que va desarrollándose.
- Ya en vida de Jesús, sus seguidores muchas veces no comprendieron bien lo que les decía: su mesianismo, por qué el camino redentor de la muerte y la resurrección, qué significaba la promesa de su presencia continua y hasta siempre. Cristo es la verdad, y la verdad plena. Pero los suyos la comprenderán gracias al Espíritu, después de la Pascua y de Pentecostés: «cuando venga Él, el Espíritu de la Verdad que los guiará hasta la verdad plena».
- En la comunidad cristiana la verdad, como la vida, siguen dinámicamente activas, en continuo progreso. La actuación del Espíritu no se entiende tanto en el sentido de «verdades nuevas», sino de que la verdad tiene que profundizarse y adaptarse a las circunstancias de la historia, aunque conserve la identidad y la fuerza del Evangelio de Jesús.
- El Espíritu es el Maestro interior de todos los cristianos, que nos ayuda a discernir los caminos del Señor. Él nos llevará hasta la verdad plena. Nos anunciará lo que ha de venir. Irá interpretando la historia como un diálogo entre “el mundo” y el proyecto de Dios; así irá guiando a los discípulos en su actividad en favor del hombre.
- La penetración del mensaje, la sintonía que hace posible la mirada de Dios sobre la historia, se realiza sólo a través del amor. Desde el amor se puede conocer el ser del hombre, reconocer su destino y su realización. Sólo desde el amor las palabras de Jesús se graban en nuestro interior y se transforman en criterios, valores, opciones.
- Es cuestión de ser dóciles al Espíritu Santo para que nos enseñe a leer los signos de los tiempos, a ver la mano de Dios en todos los acontecimientos de la vida y reconocer y andar los caminos misteriosos por los cuales nos quiere conducir, junto con toda la creación a la plenitud de la vida en Cristo.
PARA DISCERNIR
- ¿Trato de fosilizar la Vida en el Espíritu atándola a prácticas o normas?
- ¿Me dejo hablar por el Espíritu en los acontecimientos de cada día?
- ¿Me esfuerzo para que la Palabra cobre vida en la vida?
REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA
El Espíritu de la Verdad nos introducirá en toda la verdad
PARA LA LECTURA ESPIRITUAL
…Hace varios años, tuve la oportunidad de encontrar a la madre Teresa de Calcuta. Tenía en aquel momento muchos problemas y decidí aprovechar esta ocasión para pedir consejo a la madre Teresa. Apenas nos sentamos, empecé a mostrarle todos mis problemas y dificultades, intentando convencerla de lo complicados que eran. Cuando, tras haberle expuesto elaboradas explicaciones durante unos diez minutos, me callé, la madre Teresa me miró tranquilamente y me dijo: «Bien, si dedicas una hora cada día a adorar a tu Señor y no haces nunca lo que sabes que es injusto… todo irá bien».
Cuando oí estas palabras me di cuenta de improviso de que había pinchado mi globo hinchado, un globo compuesto de complicada autoconmiseración, y me había señalado, mucho más allá de mí mismo, el lugar de la verdadera curación. En realidad, me quedé tan pasmado con su respuesta que no sentí ningún deseo o necesidad de continuar.
Al reflexionar sobre este breve, aunque decisivo, encuentro, me doy cuenta de que yo le había planteado una pregunta por lo bajo y ella me había dado una respuesta por lo alto. De primeras, su respuesta no parecía adecuada con respecto a mi pregunta, pero, después, empecé a comprender que su respuesta venía desde el lugar de Dios y no desde el lugar de mis lamentaciones. La mayoría de las veces reaccionamos a preguntas por lo bajo con respuestas por lo bajo. El resultado es que cada vez hay más preguntas y, con frecuencia, respuestas cada vez más confusas. La respuesta de la madre Teresa fue como una lámpara de luz en mi oscuridad. Conocí, de improviso, la verdad sobre mí mismo…
H. J. M. Nouwen, Vivir en el Espíritu, Brescia, pp. 81s.
PARA REZAR
El viento del Espíritu en acción
Tu Espíritu es viento
que sopla donde quiere, libre y liberador,
vencedor de la ley, del pecado y de la muerte.
Tu Espíritu es viento
que se apoderó de Jesús para enviarlo a anunciar
la buena nueva a los pobres y la liberación de los cautivos.
Tu Espíritu es viento que se llevó en Pentecostés
el miedo de los apóstoles
y abrió de par en par las puertas del cenáculo,
para que la comunidad de los seguidores de Jesús
fuera siempre al mundo y libre en su palabra
y coherente en su testimonio e indecible en su esperanza.
Al viento de su Espíritu
que se lleva siempre nuestros miedos
y nos abraza en Iglesia fraterna
para que vivamos unidos en el servicio.
Tu Espíritu es viento
que reduce a cenizas
la prepotencia, la hipocresía y el lucro
y alimenta las llamas de la justicia y de la liberación
y es el alma del Reino.
Para que seamos viento en el viento, hermanos.
Pero esa tristeza se convertirá en gozo
Lectura de los Hechos de los Apóstoles 18, 1-8
Pablo dejó Atenas y fue a Corinto. Allí encontró a un judío llamado Aquila, originario del Ponto, que acababa de llegar de Italia con su mujer Priscila, a raíz de un edicto de Claudio que obligaba a todos los judíos a salir de Roma. Pablo fue a verlos, y como ejercía el mismo oficio, se alojó en su casa y trabajaba con ellos haciendo tiendas de campaña. Todos los sábados, Pablo discutía en la sinagoga y trataba de persuadir tanto a los judíos como a los paganos.
Cuando Silas y Timoteo llegaron de Macedonia, Pablo se dedicó por entero a la predicación de la Palabra, dando testimonio a los judíos de que Jesús es el Mesías. Pero como ellos lo contradecían y lo injuriaban, sacudió su manto en señal de protesta, diciendo: «Que la sangre de ustedes caiga sobre sus cabezas. Yo soy inocente de eso; en adelante me dedicaré a los paganos.»
Entonces, alejándose de allí, fue a lo de un tal Ticio Justo, uno de los que adoraban a Dios y cuya casa lindaba con la sinagoga. Crispo, el jefe de la sinagoga, creyó en el Señor, junto con toda su familia. También muchos habitantes de Corinto, que habían escuchado a Pablo, abrazaron la fe y se hicieron bautizar.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 97, 1. 2-3ab. 3bc-4 (R.: cf. 2b)
R. El Señor reveló su victoria a los ojos de las naciones.
Canten al Señor un canto nuevo,
porque él hizo maravillas:
su mano derecha y su santo brazo
le obtuvieron la victoria. R.
El Señor manifestó su victoria,
reveló su justicia a los ojos de las naciones:
se acordó de su amor y su fidelidad
en favor del pueblo de Israel. R.
Los confines de la tierra han contemplado
el triunfo de nuestro Dios.
Aclame al Señor toda la tierra,
prorrumpan en cantos jubilosos. R.
EVANGELIO
Lectura del santo Evangelio según san Juan 16, 16-20
Jesús dijo a sus discípulos:
«Dentro de poco, ya no me verán, y poco después, me volverán a ver.» Entonces algunos de sus discípulos comentaban entre sí: « ¿Qué significa esto que nos dice: «Dentro de poco ya no me verán, y poco después, me volverán a ver»? ¿Y qué significa: «Yo me voy al Padre»?» Decían: « ¿Qué es este poco de tiempo? No entendemos lo que quiere decir.»
Jesús se dio cuenta de que deseaban interrogarlo y les dijo: «Ustedes se preguntan entre sí qué significan mis palabras: «Dentro de poco, ya no me verán, y poco después, me volverán a ver».
Les aseguro que ustedes van a llorar y se van a lamentar; el mundo, en cambio, se alegrará. Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo.»
Palabra del Señor.
PARA REFLEXIONAR
- Corinto, capital de la provincia de Acaya, era una ciudad de ambiente romano, activa en su comercio y de mala fama por sus costumbres. Aquí va a estar Pablo un año y medio fundando una comunidad cristiana a la que luego escribirá dos cartas.
- Desde Atenas, Pablo pasa a Corinto, sin acompañantes. El pasaje de los hechos nos da detalles del estilo evangelizador de Pablo. Permanece en la ciudad y trabaja para mantenerse colaborando con un matrimonio que acaba de ser expulsado de Roma y que son fabricantes de lonas. Lo hará hasta que lleguen Silas y Timoteo, que le permiten dedicarse de lleno a la predicación.
- Los sábados, comienza a ir a la sinagoga a predicar a Jesús como el Mesías esperado, pero los judíos no lo aceptan, lo que provoca la ruptura de Pablo. Ellos serán responsables de no haber sabido reconocer al Mesías enviado por Dios. Se dedica entonces a predicar a los paganos, que en buen número se convierten.
- Pablo cosecha éxitos y fracasos a la vez. Los judíos lo rechazan, salvo el jefe de la sinagoga llamado Crispo. Los paganos que van convirtiéndose formarán el primer núcleo de la comunidad.
- En medio de lo apremiante de su acción evangelizadora, Pablo da ejemplo de paciencia quedándose largo tiempo, y de desinterés económico prefiriendo trabajar para no ser una carga para nadie.
***
- Después de compartir juntos tantos momentos, los discípulos experimentan la partida de Jesús como algo negativo. Esta situación les causa desconcierto y dolor. El mismo Jesús se anticipa, y trata de sanar en ellos las heridas que la experiencia de angustia y desconsuelo grabará en sus corazones el viernes santo.
- El Señor es realista y no quiere crear falsas expectativas ni engañar a sus discípulos. Se cumplirá lo anunciado por los profetas. Sabe que el momento que se acerca es doloroso y lo anuncia con pocas y sencillas palabras. La claridad del maestro es el primer paso en su pedagogía contra el escándalo que su pasión provocará en los discípulos.
- Pero no se queda en el dato objetivo de lo que habrá de suceder sino que trata de explicar a los suyos lo que sucederá, de tal modo que puedan descubrir los signos de los tiempos; la realización del plan salvador de Dios.
- Jesús no sale de este mundo hacia la nada, hacia el absurdo de la muerte sin fondo. Va hacia el Padre, hacia la plenitud de la vida. La muerte no será la última palabra. Jesús seguirá estando presente de un modo más misterioso, en medio de los suyos. El grupo de discípulos no puede entender que el camino de Jesús pase por la cruz.
- Jesús les anuncia que la tristeza se convertirá en alegría, y así como serán partícipes del poder del pecado y de la muerte, podrán proclamar la fuerza incontenible del amor que se manifestará en la resurrección.
- El mundo propone una vida sin Dios, que trata de negar el dolor, el sufrimiento y esconder hasta la misma muerte. Jesús cargando en su carne el dolor, no renunciando ni yendo por la salida fácil, le ha quitado todo poder a la muerte, y la resurrección ha transformado definitivamente la realidad del universo para todo el que cree.
- La muerte de Jesús no lo ha alejado de nuestra vida. Una vez cumplida su misión, el enviado del Padre volverá para habitar en nuestro propio interior, identificándose con nosotros, para que podamos identificarnos con Él de tal forma, que el mundo lo siga contemplando desde su Iglesia, la cual tiene que continuar en el mundo por la fuerza del Espíritu Santo su obra de salvación.
PARA DISCERNIR
- ¿Cuáles son mis esperanzas? ¿Cuáles mis anhelos más profundos?
- ¿De qué manera la espera de lo que va a venir ilumina mi hoy?
- ¿De qué manera mi hoy alimenta mi esperanza?
REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA
Nuestra tristeza se convertirá en gozo
PARA LA LECTURA ESPIRITUAL
…La alegría es esencial en la vida espiritual. Si pensamos o decimos cualquier cosa de Dios y no lo hacemos con alegría, nuestros pensamientos y nuestras acciones serán estériles. Podemos ser infelices por muchas causas, pero podemos encontrar aún alegría, porque ésta procede de saber que Dios nos ama. Estamos inclinados a pensar que cuando estamos tristes no podemos estar contentos, pero en la vida de una persona que pone a Dios en el centro pueden coexistir el dolor y la alegría. No resulta fácil de comprender, pero cuando pensamos en alguna de nuestras experiencias más profundas, como asistir al nacimiento de un niño o a la muerte de un amigo, con frecuencia forman parte de la misma experiencia un gran dolor y una gran alegría, y descubrimos a menudo la alegría en medio del dolor.
Recuerdo los momentos más dolorosos de mi vida como momentos en los que he llegado a ser consciente de una realidad espiritual mucho más grande que yo, y que me permitía vivir mi dolor con esperanza. Incluso me atrevo a decir: «Mi dolor fue el lugar en el que encontré mi alegría». La alegría no es cualquier cosa que simplemente nos sucede. Debemos elegir la alegría y seguir eligiéndola cada día. Se trata de una elección basada en el conocimiento de que pertenecemos a Dios y hemos encontrado en Dios nuestro refugio y nuestra salvación, y que nada, ni siquiera la muerte, nos lo puede arrebatar…
H. J. M. Nouwen, Vivir en el Espíritu, Brescia, pp. 17s.
PARA REZAR
Salmo de alegría y esperanza
Con un corazón limpio y
sincero queremos darte gracias.
Tu Palabra es sincera y llena el corazón de alegría;
tus obras son grandiosas,
y están iluminadas de verdad;
Tú amas, Dios nuestro, la justicia; toda la tierra está rociada
con la lluvia de tu bondad.
Dios, nos sentimos pequeños,
como granitos de arena, ante ti;
Tú tienes palabras de vida que no pasan;
palabras que se hacen acción;
solamente Tú, Señor, tienes poder
para hacer lo que dices.
Tú contemplas nuestro suelo
desde la altura de tus cielos;
tu corazón de Padre ama,
uno a uno, a todos los hombres;
desde tu casa te alegra el bien del hombre
y su progreso; desde tu casa te entristece
el mal del hombre y su retroceso.
Tus ojos llenos de amor y ternura
cuidan de la obra de tus manos,
todos los que esperamos en el triunfo de tu amor,
tendremos respuesta; porque Tú,
Oh Dios, has liberado nuestra alma de la muerte
entregando en la cruz al Hijo amado,
al Enviado: Él nos ha dado vida nueva
y en Él te decimos: Abba, Padre.
Emilio Mazariegos
Tendrán una alegría que nadie les podrá quitar
Lectura de los Hechos de los Apóstoles 18, 9-18
Una noche, el Señor dijo a Pablo en una visión: «No temas. Sigue predicando y no te calles. Yo estoy contigo. Nadie pondrá la mano sobre ti para dañarte, porque en esta ciudad hay un pueblo numeroso que me está reservado.» Pablo se radicó allí un año y medio, enseñando la Palabra de Dios.
Durante el gobierno del procónsul Galión en Acaya, los judíos se confabularon contra Pablo y lo condujeron ante el tribunal, diciendo: «Este hombre induce a la gente a que adore a Dios de una manera contraria a la Ley.»
Pablo estaba por hablar, cuando Galión dijo a los judíos: «Si se tratara de algún crimen o de algún delito grave, sería razonable que los atendiera. Pero tratándose de discusiones sobre palabras y nombres, y sobre la Ley judía, el asunto les concierne a ustedes; yo no quiero ser juez en estas cosas.» Y los hizo salir del tribunal.
Entonces todos se apoderaron de Sóstenes, el jefe de la sinagoga, y lo golpearon ante el tribunal. Pero a Galión todo esto lo tuvo sin cuidado.
Pablo permaneció todavía un cierto tiempo en Corinto. Después se despidió de sus hermanos y se embarcó hacia Siria en compañía de Priscila y de Aquila. En Cencreas, a raíz de un voto que había hecho, se hizo cortar el cabello.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 46, 2-3. 4-5. 6-7 (R.: 8a)
R. Dios es el Rey de toda la tierra.
Aplaudan, todos los pueblos,
aclamen al Señor con gritos de alegría;
porque el Señor, el Altísimo, es temible,
es el soberano de toda la tierra. R.
El puso a los pueblos bajo nuestro yugo,
y a las naciones bajo nuestros pies;
él eligió para nosotros una herencia,
que es el orgullo de Jacob, su predilecto. R.
El Señor asciende entre aclamaciones,
asciende al sonido de trompetas.
Canten, canten a nuestro Dios,
canten, canten a nuestro Rey. R.
EVANGELIO
Lectura del santo Evangelio según san Juan 16, 20-23a
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
«Les aseguro que ustedes van a llorar y se van a lamentar; el mundo, en cambio, se alegrará. Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo.
La mujer, cuando va a dar a luz, siente angustia porque le llegó la hora; pero cuando nace el niño, se olvida de su dolor, por la alegría que siente al ver que ha venido un hombre al mundo.
También ustedes ahora están tristes, pero yo los volveré a ver, y tendrán una alegría que nadie les podrá quitar. Aquel día no me harán más preguntas.»
Palabra del Señor.
PARA REFLEXIONAR
- La acción misionera de Pablo siempre tiene como meta los centros más importantes. Ahora Corinto, «la ciudad de los mares», puente entre Oriente y Occidente, floreciente centro comercial, será la tercera ciudad de Europa que recibe el Evangelio. Pablo en año y medio funda la Iglesia, que será la destinataria de dos de sus principales cartas.
- En Corinto, Pablo una vez más será citado ante la justicia, acusado de ser un perturbador. Una noche, el Señor dijo a Pablo en una visión: «No temas, habla sin callar nada, porque Yo estoy contigo.»
- La estadía de Pablo en Corinto no debió resultarle fácil por dificultades externas e internas. El motivo que le da Dios es de infinita ternura: «muchos de esta ciudad son pueblo mío».
- Pablo sigue exponiendo las Escrituras que llevan a Cristo, pero los judíos se sublevaron contra él, lo persiguen acusándolo que persuadía a la gente para que adore a Dios de un modo extraño a la Ley.
- El procónsul Galión, hermano de Séneca, se desentiende irónicamente de la discusión, al ver que no afecta al orden público, sino a cuestiones internas de religión, y no hace caso tampoco al ver que apalean precisamente al jefe de la sinagoga, que ahora es Sóstenes.
***
- La muerte no tendría la última palabra y los discípulos deben saberlo.
- Al evocar la imagen de la mujer parturienta para describir el sufrimiento que espera a los discípulos, Jesús les enseña a reconocer en ellos el signo de la venida de los últimos tiempos. Es una visión nueva de las cosas. Todo sufrimiento, dice Jesús, es fecundo.
- La alegría es un fruto característico de la Pascua. La alegría que nos propone Jesús es la misma que vivió Él: alegría que supone fidelidad y solidaridad hasta la muerte, pero que engendra nueva vida.
- La alegría que brota de la Pascua es profunda, pasa a veces por el crisol del dolor y la renuncia, pero es fecunda. Una alegría que no se produce al margen de las pruebas de la vida, sino como una victoria sobre ellas.
- El intento de negar el dolor es inútil y está llamado al fracaso. Todo sufrimiento vivido desde el amor nos hace crecer y madurar.
- La alegría de Dios es duradera, es interior porque es producida directamente por el Espíritu Santo. Aunque pasemos por situaciones difíciles y apremiantes, la alegría interior se convierte en un río interno que nos hace capaces de afrontar con entereza los problemas y dificultades, por más difíciles o graves que éstos sean.
PARA DISCERNIR
- ¿Cuáles son los motivos de mis alegrías? ¿Dónde busco la alegría?
- ¿Rehuyo todo sufrimiento o esfuerzo? ¿Cuáles son las cosas que me provocan tristeza?
- ¿Qué lugar ocupa Cristo en mis alegrías y en mis tristezas?
REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DIA
Nadie nos podrá quitar esta alegría
PARA LA LECTURA ESPIRITUAL
…Jesús emplea la imagen de la mujer que espera dar a luz: antes del parto se afana y está triste y preocupada porque se le viene encima un trance doloroso que, incluso, pone en peligro su salud, su vida. Pero una vez que ha dado a luz se alegra por la vida que ha nacido, con la cual ella hace que la raza humana siga adelante. Esta imagen, tan común en la Biblia (por ej: Is 13, 8; Mt 24, 8; etc.), es empleada por Jesús para expresar la situación de su pequeña comunidad en el mundo: ella es como una madre que se preocupa y está triste antes de dar a luz a tantos seres humanos por la fe en Dios Padre y en su Hijo Jesucristo; pero que se alegra cuando puede reunir en torno a la mesa del Señor a todos los hijos de su fecundidad misionera, de su testimonio evangélico.
Acercándonos al final de este tiempo pascual debemos renovar la alegría que llena a la Iglesia por la resurrección de Jesucristo, por la acción de Dios que lo ha constituido Señor de la historia, juez de vivos y muertos. Y esta alegría pascual nos debe ayudar a sobrellevar con fortaleza las persecuciones, los odios, discriminaciones y sufrimientos de la evangelización…
Diario Bíblico. Cicla (Confederación Internacional Claretiana de Latinoamérica).
PARA REZAR
Himno a la alegría
Escucha hermano
la canción de la alegría
el canto alegre
del que espera un nuevo día.
Ven canta sueña cantando
vive soñando un nuevo sol
en que los hombres
volverán a ser hermanos.
Si en tu camino
solo existe la tristeza
y el canto amargo
de la soledad completa.
Si es que no encuentras
la alegría en esta tierra
búscala hermano más allá
de las estrellas.
31 DE MAYO – VISITACIÓN DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA (F)
Feliz de ti, Virgen María, por haber creído
Lectura de la profecía de Sofonías 3, 14-18
¡Grita de alegría, hija de Sión! ¡Aclama, Israel! ¡Alégrate y regocíjate de todo corazón, hija de Jerusalén! El Señor ha retirado las sentencias que pesaban sobre ti y ha expulsado a tus enemigos. El Rey de Israel, el Señor, está en medio de ti: ya no temerás ningún mal.
Aquel día, se dirá a Jerusalén: ¡No temas, Sión, que no desfallezcan tus manos!
El Señor, tu Dios, está en medio de ti, es un guerrero victorioso! El exulta de alegría a causa de ti, te renueva con su amor y lanza por ti gritos de alegría, como en los días de fiesta.
Yo aparté de ti la desgracia, para que no cargues más con el oprobio.
Palabra de Dios.
O bien:
Lectura de la carta del apóstol san Pablo
a los cristianos de Roma 12, 9-16b
Hermanos:
Amen con sinceridad. Tengan horror al mal y pasión por el bien. Ámense cordialmente con amor fraterno, estimando a los otros como más dignos. Con solicitud incansable y fervor de espíritu, sirvan al Señor. Alégrense en la esperanza, sean pacientes en la tribulación y perseverantes en la oración. Consideren como propias las necesidades de los santos y practiquen generosamente la hospitalidad.
Bendigan a los que los persiguen, bendigan y no maldigan nunca. Alégrense con los que están alegres, y lloren con los que lloran. Vivan en armonía unos con otros, no quieran sobresalir, pónganse a la altura de los más humildes.
Palabra de Dios.
SALMO Is 12, 2-3. 4bcd. 5-6 (R.: 6b)
R. ¡Es grande en medio de ti el Santo de Israel!
Este es el Dios de mi salvación:
yo tengo confianza y no temo,
porque el Señor es mi fuerza y mi protección;
él fue mi salvación.
Ustedes sacarán agua con alegría
de las fuentes de la salvación. R.
Den gracias al Señor, invoquen su Nombre,
anuncien entre los pueblos sus proezas,
proclamen qué sublime es su Nombre. R.
Canten al Señor porque ha hecho algo grandioso:
¡que sea conocido en toda la tierra!
¡Aclama y grita de alegría, habitante de Sión,
porque es grande en medio de ti
el Santo de Israel! R.
EVANGELIO
Lectura del santo Evangelio según san Lucas 1, 39-56
María partió y fue sin demora a un pueblo de la montaña de Judá. Entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel. Apenas esta oyó el saludo de María, el niño saltó de alegría en su seno, e Isabel, llena del Espíritu Santo, exclamó:
«¡Tú eres bendita entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a visitarme? Apenas oí tu saludo, el niño saltó de alegría en mi seno. Feliz de ti por haber creído que se cumplirá lo que te fue anunciado de parte del Señor.»
María dijo entonces:
«Mi alma canta la grandeza del Señor, y mi espíritu se estremece de gozo en Dios, mi Salvador, porque el miró con bondad la pequeñez de tu servidora. En adelante todas las generaciones me llamarán feliz, porque el Todopoderoso ha hecho en mí grandes cosas: ¡su Nombre es santo! Su misericordia se extiende de generación en generación sobre aquellos que lo temen. Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los soberbios de corazón. Derribó a los poderosos de su trono y elevó a los humildes. Colmó de bienes a los hambrientos y despidió a los ricos con las manos vacías. Socorrió a Israel, su servidor, acordándose de su misericordia, como lo había prometido a nuestros padres, en favor de Abraham y de su descendencia para siempre.»
María permaneció con Isabel unos tres meses y luego regresó a su casa.
Palabra del Señor.
PARA REFLEXIONAR
- No sabemos si Sofonías, cuando habla de la Hija de Sión, piensa en el pueblo elegido o en una persona individual que lo simboliza; posiblemente se le superponen ambas imágenes. Lo importante para él es la expresión que muestra que Yahvé está en medio de su pueblo. Y, cuando Yahvé se acerca a los suyos, aparta el temor y aparece la fiesta, la alegría y el gozo.
- Lucas contempla a María desde los antiguos símbolos judíos: la Hija de Sión, el arca de la Alianza, el santuario cerrado; todo lo que puede significar la presencia cercana del Dios entrañable. María, como el Arca de la Alianza, sube a la montaña de Judá llevando consigo al Dios del gozo.
- Lucas subraya su prontitud para el servicio. La indicación de que Isabel, su prima, de edad ya avanzada, va a necesitar ayuda basta para provocar el movimiento de la Virgen María.
- No se regodea en su privilegio y alegría. María sale de su mundo, de sí misma y tomando el camino que atravesaba los montes de Samaría acude con rapidez a Ain Karem donde residían Isabel y Zacarías para ayudar a su parienta.
- Así como el ángel «entró» en su casa y la «saludó» con el “Ave María”, María «entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel». Se confunden en un abrazo la que va a ser Madre de Dios con la que será madre del Precursor.
- Dos mujeres habitadas por el Espíritu Santo comparten la obra de Dios en un impulso de ternura. El encuentro de las dos madres sirve de telón de fondo para el encuentro de los dos niños que lleva cada una en su seno. El hijo de María, verdadero “Hijo del Altísimo” concebido gracias a la potencia del Espíritu, es la fuente del gozo que experimenta Isabel al oír el saludo de María y la causa por la cual el otro niño, Juan, salta de alegría en el vientre de su madre.
- Isabel proclama a María, Bienaventurada porque ha creído. Ella es la primera de los pobres de Yahvé que, en medio de su misma pobreza ha recibido la gracia de Dios y ha respondido con fe y con el corazón abierto a los planes de Dios. María es de Dios. Por eso es grande y dichosa: ha recibido el don de Dios, ha creído, y puede presentarse como portadora de Dios entre los seres humanos.
- María es mujer de nuestra historia, abierta a Dios y a los seres humanos. Ha vivido siempre en actitud de gratuidad y de donación. Se reconoce amada de Dios que es su Señor, y canta agradecida. Mujer solidaria que cree en el Dios solidario.
- El Dios de María, el Dios Santo y Todopoderoso es solidario y está a favor
de los humildes, de los humillados, de los pobres. María se reconoce inmersa en la historia de pobreza y sufrimiento de los seres humanos, descubriendo, al mismo tiempo, la fuerza creadora de Dios que transforma, por medio de Jesús, las viejas condiciones de la historia. María alaba al Señor por esa misteriosa forma en que actúa y proclama no sólo lo que Dios ha hecho en su vida, sino que alza su voz para cantar la acción de Dios en la humanidad. - María cree y canta a un Dios solidario y, por eso, liberador del mal que pesa sobre la vida del hombre bajo diversas formas. La solidaridad lleva a Dios a hacerse hombre en Jesús de Nazaret. Esa solidaridad liberadora del Dios de la vida, lleva a Jesús a la pasión y a la cruz. María, Mujer solidaria estará al lado de su hijo que muere en la cruz.
- Hoy es preciso mirar a María, verla en el Evangelio como ella se presenta y no como nosotros nos la imaginamos. Es necesario mirar a María para contemplar el papel esencial que ella tiene en el misterio de Cristo y en el misterio de la Iglesia. En ella, como imagen de la Iglesia, se nos muestra el cuño con el que cada cristiano y la Iglesia entera debe ser modelada.
- …“La Iglesia contempla a María «como purísima imagen de lo que ella misma, toda entera, ansía y espera ser”… (SC 103; MC 22). En la escuela de la Madre de Dios, la Iglesia aprende el estilo de vida de la gratuidad, del amor que se adelanta a las necesidades del otro y le trasmite no sólo la vida, sino el gozo y el sentido de la vida: …»La Virgen fue en su vida ejemplo de aquel amor maternal con que es necesario que estén animados todos aquellos que, en la misión apostólica de la Iglesia, cooperan a la regeneración de los hombres»… (LG 65).
- En el acontecimiento de la Visitación, María ayuda a la Iglesia a tomar conciencia de su vocación misionera. …“En efecto, con su visita a Isabel, María realiza el preludio de la misión de Jesús y, colaborando ya desde el comienzo de su maternidad en la obra redentora del Hijo, se transforma en el modelo de quienes en la Iglesia se ponen en camino para llevar la luz y la alegría de Cristo a los hombres de todos los lugares y de todos los tiempos…” San Juan Pablo II
PARA DISCERNIR
- ¿Qué me dice la imagen de María en la Visitación?
- ¿Reconozco en la servicialidad un gesto evangelizador?
- ¿Sé proclamar lo que Dios obra en mi vida y en la historia?
REPITAMOS A LO LARGO DE ESTE DÍA
Mi alma canta la grandeza del Señor
PARA LA LECTURA ESPIRITUAL
Donde llega María, Jesús está presente
Hoy, en la fiesta de la Visitación, como en todas las páginas del Evangelio, vemos a María dócil a los planes divinos y en actitud de amor previsor a los hermanos. La humilde joven de Nazaret, aún sorprendida por lo que el ángel Gabriel le había anunciado —que será la madre del Mesías prometido—, se entera de que también su anciana prima Isabel espera un hijo en su vejez. Sin demora, se pone en camino, como dice el evangelista (cf. Lc 1, 39), para llegar «con prontitud» a la casa de su prima y ponerse a su disposición en un momento de particular necesidad.
¡Cómo no notar que, en el encuentro entre la joven María y la ya anciana Isabel, el protagonista oculto es Jesús! María lo lleva en su seno como en un sagrario y lo ofrece como el mayor don a Zacarías, a su esposa Isabel y también al niño que está creciendo en el seno de ella. «Apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo —le dice la madre de Juan Bautista—, saltó de gozo el niño en mi seno» (Lc 1, 44). Donde llega María, está presente Jesús. Quien abre su corazón a la Madre, encuentra y acoge al Hijo y se llena de su alegría. La verdadera devoción mariana nunca ofusca o menoscaba la fe y el amor a Jesucristo, nuestro Salvador, único mediador entre Dios y los hombres. Al contrario, consagrarse a la Virgen es un camino privilegiado, que han recorrido numerosos santos, para seguir más fielmente al Señor. Así pues, consagrémonos a ella con filial abandono.
Benedicto XVI – papa 2005-2013 – Discurso del 31 de mayo 2006, gruta de Lourdes, Vaticano.
PARA REZAR
Virgen María, que movida por la caridad,
no dudaste en abandonar tu tierra
y ponerte en marcha hacia la casa de tu prima Isabel,
dame un corazón desprendido
para que no tema abandonar mis propias seguridades
y lanzarme al encuentro de aquellos que me necesitan.
Tú, que a pesar de estar embarazada,
te pusiste al servicio de tu anciana pariente
que necesitaba de tu ayuda,
enséñame a hacer de mi vida un servicio constante a los demás.
Que sepa llevar a los demás a Jesucristo,
así como tú lo llevaste en tu vientre,
y lo hiciste presente en la casa de Isabel.
Yo también quiero, Madre, ser misionero como tú,
y hacer presente a Jesucristo en todo lugar donde vaya,
donde la voluntad del Padre del Cielo quiera llevarme.